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Habéis olvidado lo que dijo el poeta muerto.
Y soy incapaz de traducíroslo para que su poder os subyugue y os haga comprender que careceis de propósito y rumbo, y que el tiempo es triste y nada vale.
A fin de que os libréis de esta decepción que, si no os dais cuenta de vuestra carencia de propósito os penetra, convirtiéndoos en seres seniles.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

::¿Qué es eso?::


Casi todo me atrae. Sin embargo se alberga en mí algún buscador infatigable. ¿Por qué no hay un descubrimiento de la vida? Algo para ponerle las manos encima y exclamar: "¿Es esto?" Mi depresión es un sentirme acosada. Estoy buscando: pero no, no es eso… no es eso. ¿Qué es entonces? ¿Tendré que morir sin haberlo encontrado? Y luego (como anoche, cuando atravesaba Russell Square) veo las montañas en el cielo: las grandes nubes; y la luna que se está alzando sobre Persia; tengo una grande, sorprendente impresión de que hay algo allí, que es "eso"?

No es exactamente la belleza a lo que me refiero. Quiero decir que la cosa en sí basta: es satisfactoria; acabada. También una impresión de mi propia rareza, de la rareza de estar caminando sobre la tierra.

También está ahí, la infinita extrañeza de la posición humana; estar atravesando Russell Square, con la luna allí arriba y las nubes como montañas. quién soy yo, qué soy, y todo el resto; preguntas que siempre flotan en torno: y de pronto doy de narices con algún hecho concreto -una carta, alguien- y vuelvo a ellos con un gran sentimiento de frescura.

Y así continúa. Suelo toparme frecuentemente con este "eso", y experimento entonces un gran reposo.

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